Inés y el Garabato son descubiertos por Esperanza a las puertas de la casa de los Martínez Negrete. Pablo, acusado de haber disparado el arma que hirió a Doménico, permanece retenido en comisaría por el estado crítico del Italiano. El Silencioso le ofrece ayuda a Pablo para conseguir su libertad, pero es trasladado a prisión, donde se encuentra con Centavito.