Gülce da su declaración a la policía y acusa a Sahin, lo que hace que lo encarcelen. Con su padre en prisión, Ali piensa que no hay razón para convertirse en campeón. Ante su desmotivación, Rauf le pide ayuda a Sahin en la cárcel. Mientras, Yigit prueba suerte por última vez para vengarse de Tekin. Está dispuesto a arriesgarlo todo y se mete en un juego muy peligroso.