Una inocente conversación con Ugur hace que Cemal se entere de que Helin sabe más de lo que le hace creer. Pero, cuando le pide explicaciones, es él el que termina por confesarle sus verdaderos sentimientos por Asiye. Despechada, su mujer le pone entre la espada y la pared, si se divorcia de ella, hablará con la policía. Además, el embarazo de Zuhal sale a la luz.