Santi toma la decisión de ir a Bruselas a hablar con Rubén. Violeta, por su parte, le dice a su madre que habló con Santiago: Blanca lo reconoce: fue ella la que desapareció y no su padre. Mateo y Miranda están tensos por el tema del matrimonio: el primero no quiere casarse y a la segunda le cuesta admitir que sí quiere.