María rebosa de felicidad por su relación con Sergio. Por fin siente que lo tiene todo: amistad, amor… Y hace partícipe a sus amigas de su alegría de vivir. También Matilde y Sebastián han decidido disfrutar de su amor. Pero no a todos les sonríe la vida de la misma manera: Andrea se sabe culpable de la posible ruptura de su familia.