David pasa la noche en el CBC y a la mañana siguiente se presenta en el apartamento de Iñigo para que le deje algo de ropa. María no quiere saber nada de David desde que su abuela les pillara besándose. Iñigo no ofrece mucha resistencia. Su gran preocupación en estos momentos es la gran final de baloncesto que tienen que ganar a costa de lo que sea.