Míriam y Alex siguen los consejos de Jaime y deciden indagar en el pasado de Clara en busca de algún trauma que haya afectado a su relación con los chicos. María, que sabe que Bruno está en la ciudad, empieza a sentirse agobiada por la presión de Dani, mientras que Iñigo, que se siente señalado por todo el mundo como el presunto agresor de Dani, confiesa a David que está enamorado de María.