Clara se presenta en casa de Carlota y pide que le dejen pasar allí la noche, aludiendo que sus padres han salido de viaje y no tiene con quien quedarse. Clara se instala en la cama de Míriam, pero a la mañana siguiente Nico y Míriam regresan de Bilbao. La situación se hace incómoda para todos. Además, Clara no ha dicho toda la verdad respecto a su repentina salida de su casa.