Visitamos la Sagrada Familia, el templo inacabado de Gaudí, y subimos hasta el Castillo de Montjuïc, con vistas privilegiadas sobre el puerto. Podemos tomarnos una caña y tapear en Salts - Terrassa Bar Montjuïc, donde hay unas vistas increíbles de la ciudad y de las plataformas olímpicas de saltos del 92.