En el interior de una cafetería y sin oponer resistencia fue detenido un hombre de 51 años acusado de asesinar a su propio padre. El presunto parricida había discutido previamente con su progenitor en el domicilio de su padre. Según las primeras investigaciones, la pelea acabó de forma trágica cuando el hijo asestó varias puñaladas al anciano, de 79 años, que le causaron la muerte.