Patricia Pardo homenajea a María Callas luciendo un vestido de Dior, cuya propietaria no es ni más ni menos que la mismísima Bibiana Fernández. Además, se conocen nuevos detalles sobre el meticuloso plan llevado a cabo por la empleada doméstica de Iker Casillas para robarle relojes de lujo valorados en más de 50.000 euros.