Preso de un ataque de celos, Paco, un chico de 23 años, la emprendió a tiros con su expareja. Tras coger una escopeta de su casa, trataba de acabar con la vida de la mujer. La historia acaba bien gracias a Pedro, dueño de la farmacia a la que la joven, su madre y su hijo consiguen llegar para resguardarse, que haciendo gala de sus reflejos baja el cierre del negocio y consigue parar el disparo.