Helen Lindes se convirtió en la reina indiscutible de la belleza en el certamen de ‘Miss España’ que se celebró en el año 2000 y se llevó a Las Palmas la espectacular corona por la que habían luchado representantes de varias provincias. Fue una noche “una tanto accidentada”, pero que no impidió que todas y cada una de las aspirantes brillaran como nunca.