La última hoguera a la que Darío Sellés se enfrentó en su paso por la cuarta edición de 'La isla de las tentaciones' supuso un antes y un después. En ella descubrió unas imágenes de su novia, Sandra Férriz, que lo cambiaron todo. Y es que la tablet le mostró a su chica cayendo en la tentación con uno de los solteros, con el que se besó uno de los sofás de su villa.