Rodrigo Nogueira, el Don Juan gallego, utilizó todas sus artimañas para seducir a más de cien mujeres a través de perfiles falsos, con el objetivo de estafarlas. Creaba un personaje a medida de cada víctima, operaba por toda España y, tras engañarlas, desaparecía sin dejar rastro. Algunas de las afectadas relatan su experiencia.