Las apariciones públicas de Joe Biden en los últimos meses, con episodios de desorientación o tropiezos que evidencian sus 81 años, han ido sembrando dudas sobre si el presidente de Estados Unidos debería o no presentarse a las elecciones del próximo noviembre. El primer debate del candidato demócrata frente al republicano, Donald Trump, ha acabado de confirmar lo que muchos temían: que la edad no perdona y que quizás Biden no es el mejor candidato.