Uno de ellos ya estaba salvado. Jorge Javier no les hacía esperar y les comunicaba la decisión de la audiencia: "La audiencia ha decidido que debe salvarse de la expulsión… ¡Óscar!". Tras escuchar su nombre, ponía rumbo a la casa después de despedirse: "Estad las dos tranquilas, buenas noches, gracias. Adiós".