Iker Jiménez y Carmen Porter arranca La Nave en una playa bioluminiscente de Nueva Zelanda, cuyas aguas tienen un color azul neón debido a los microorganismos que hay en ellas. Además, ambos recuerdan el hallazgo de El Niño del cerro El Plomo, cuyos restos momificados fueron encontrados 1954, en la región Metropolitana de Santiago (Chile).