Los nazis llevaron a cabo numerosas expediciones a través de la Ahnernerbe, ya que el Tercer Reich siempre estuvo en busca de la llamada tierra hueca, entre muchos otros lugares y objetos sagrados. La expedición al Tíbet y a las ciudades internas entre los años 1938 y 1939 tuvieron como objetivo encontrar Agharta o Shambala, y las puertas a ese mundo desconocido que era la tierra hueca.