Después de estar mucho tiempo de alquiler, los que fueran participantes de ‘La última tentación’ han decidido embarcarse en una hipoteca para cumplir uno de sus grandes objetivos, tener su propia casa. Ahora que la familia va a aumentar con la llegada de Río, Patri y Lester no han dudado en gastarse todos sus ahorros e incluso recurrir a sus familiares para poder comprar el que desde ahora ya es su hogar.