El señor Hikmet fallece rodeado de su familia, y soñando un futuro perfecto para todos ellos. Ceylan le dice a Han que hay una posibilidad para que ella pueda tener un hijo, pero para ello debe de estar casada con Han, al que se lo hace saber, esperando en un futuro que le haga la gran pregunta. Durante una terapia con la doctora, Gülben y Safiye necesitan decir todo lo que se llevan guardando sobre su padre para dejarle ir con el perdón.