Mazo continúa haciéndose pasar por el hijo de Hilkmet, el padre de la familia. Mientras, Gülben reúne el valor y supera sus temores para proponerle a Essat que pasen la noche juntos, un paso que le había resultado muy difícil. Ruya decide regresar a vivir con su padre y se despide de todos. Finalmente, Han lleva a su padre al cementerio para demostrarle que Mazo no es Omer, el hijo que Hilkmet perdió.