Safiye se muestra preocupada por Naci tras el desafortunado incidente con Hikmet. A la mañana siguiente, se produce un tierno acercamiento entre ambos cuando Naci, con valentía, deja entrever su deseo de pedir su mano. Sin embargo, esta declaración abruma a Safiye, pues aún no se siente preparada para el matrimonio, y a Hikmet, quien teme que su hija lo abandone. Mientras tanto, Gülben se culpa por no poder entregarse plenamente a Esat, a pesar del cariño y respeto con los que él la trata.