Naci se mantiene esperanzado y le dice a Safiye que no puede permitir que el recuerdo de su madre la atormente para siempre. Le recuerda que el tocar a los demás no es algo negativo. Por otro lado, Gülben lucha por controlar su enfermedad y hace todo lo posible para que Esat se sienta a gusto, pero le resulta difícil dejar de lado su trastorno obsesivo-compulsivo con la limpieza. En un intento por evitar la cercanía, moja la cama a propósito para evitar que duerman juntos. Esat pronto se da cuenta de que lo ha hecho a propósito y reacciona con molestia.